Seguramente
has tenido un año muy agitado; entre las labores domésticas, el trabajo y la
familia, quizás necesites escapar un poco de la realidad.
Si esa es
tu intención te tenemos el destino perfecto, la surrealista ciudad de
Barcelona, en España.
Barcelona
tiene un aire de surrealismo, lo cual es de esperarse ya que Salvador Dalí, uno
de los máximos exponentes del movimiento artístico surrealista, vivió un tiempo
en esta ciudad dejando mucho de su legado, también el arquitecto catalán Antoni
Gaudí diseñó varios de los edificios que hoy se alzan sobre esas tierras
españolas.
Al viajar a
Barcelona no podemos dejar de visitar el Templo Expiatorio de la Sagrada
Familia, pues al entrar allí se tiene la sensación de haber pasado al otro lado
del espejo; este viaje se puede
continuar con una visita al Parc Güell.
Al atardecer
saborea una sangría en la terraza de alguna cafetería en Las Ramblas mientras
observas a los llamativos artistas callejeros y crea tu propio banquete móvil
tapeando de bar en bar.
Ya sabes,
toma tu pasaporte directo al surrealismo y trasciende a otro mundo.
Fuente: Trip
Advisor
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